El Señor va como el viento
cruzando sobre el tiempo;
nos enseña que las sombras
son solo sombras, no cabello.
El Señor va como espada
cortando la roca del miedo;
nadie puede detenerlo
porque tiene corazón de sueño.
El Señor va como velero
a través del infierno;
camina a pie sobre el fuego eterno
para demostrar que él es verdadero.
El Señor va como lluvia
cruzando verdes cerros;
nadie puede decir que ha muerto
porque él venció al madero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario