La mayoría de imágenes publicadas en este blog, son tomadas de la red o internet, si alguno cree que le violo sus derechos de autor, avisarme por comentario y la eliminaré inmediatamente...

jueves, 12 de julio de 2012

Sirenas de rutina

Para: André Cruchaga
 
Tengo la convicción de que no existes
y sin embargo te oigo cada noche...
Mario Benedetti.

Trato de no hundirme en la barcaza del consumismo, trato de escupir al fango que monta mis zapatos, huyo del río fétido de las emociones del pecado, sin embargo, pienso en las sirenas que deambulan en las aceras del pobre pueblo de mis entrañas. Comienzo a ver que las ninfas tienen un parecido con las sirenas, pero hay algo que interrumpe mi pensamiento, no sé, ¿Qué puede ser? ¡Ya sé!, lo dudo todavía, por eso las caricias del deseo son puntas del segundo, que luego terminan en minuto. Pasan las horas y la calle que lleva al lago, se está convirtiendo en polvo inerte, ya no se ve, ¡pero ahí está!, ¿dónde, no la veo?, está en el cerebro, esperando que la dibujes en cada escrito que hagas. Sospecho que jamás has existido, pero es posible que logres plasmarte siempre en el umbral de cada ser humano. En fin, la vida en el lápiz de la poesía tiene muchos infiernos, como dijo María Zambrano: "La poesía es realmente el infierno"; porque quizá tenga muchas puertas y figura al orbe, en verdad sí que las tiene, puertas que no deben abrirse, pero el escritor rompe los esquemas de la curiosidad y no muere como el gato; trata de mantenerse vivo junto al regazo de la poesía, de la narrativa, del poder fijar un porcentaje de realismo mágico en la vida cotidiana. Sufro cuando alguien me pregunta: ¿Y para qué escribes?, en silencio le contesto: Escribo para apartarme del mundo, pero lo dibujo en mis escritos, tal y como lo vivimos, para que otros amantes los lean y se proyecten un nuevo comportamiento...         

No hay comentarios:

Publicar un comentario