Esbelto rostro cincelado en el desván,
ojos que me miran con huracán;
zapatos lánguidos del dedo gordo,
llevando consigo el oír del sordo.
¿Quiénes serán los que disfrutarán
a este sonido rico del volcán?;
sólo el trineo del arpa del tordo,
disfrutará sin ningún estorbo.
Eres delicada como la rosa,
dulce como la miel de abeja
y triste como lágrimas de oveja.
Todo esto es por tu alma hermosa;
aunque alguno te tome como reja,
seguramente no quedarás perpleja.
a este sonido rico del volcán?;
sólo el trineo del arpa del tordo,
disfrutará sin ningún estorbo.
Eres delicada como la rosa,
dulce como la miel de abeja
y triste como lágrimas de oveja.
Todo esto es por tu alma hermosa;
aunque alguno te tome como reja,
seguramente no quedarás perpleja.
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