Eclipse en el ojo del gato

Desteñidos los clanes que ahora prometen después de tanto dolor...

Inconcluso estoy en la pradera del eclipse en el ojo del gato, sabiendo que las tormentas no se calman sino tienen dominio Alfa o Beta; ofreciéndome estoy a la orfandad de los niños que ahora piden en las calles; plañen, lloran, sollozan los planes donde duermen los huérfanos. Adentrándome en la desnuda tierra de mi país estoy diciendo: "paint it black", tal vez así la flema de la violencia cesa ante la oscuridad, porque no nos vamos a ver unos a otros. Dos piedras caminando sobre el asfalto junto a mí, platicaban un día y me dijeron al unísono: Señuelos habrán dentro de las promesas que unos y otros hacen; mientras en silencio, otros mueren en la tormenta. Yo perplejo les dije: Algún río de cloacas se ha desatado sobre la mente de los prometedores y ahora ya no pueden detenerlo. Al terminar la conversación me fui a la joya de la pradera y tome una tortuga que por ahí merodeaba, agitándola salió de su caparazón y me dijo: Así salen los crímenes en la portada de "El Diario de Hoy" son el menú del día. Con una cascada en los ojos le dije: Acechados son los niños en la noche y en el día, hasta por sus padres. Meditando estoy sobre la justicia, así como Eduardo Galeano dijo : La justicia es como las serpientes, sólo muerde a los descalzos. El cumplir del hierro es la muerte y el cumplir del bronce es el anuncio de las osamentas; debajo de cada promesa siempre hay una inconclusa locura, locura porque siempre las vacas vuelven al redil, redil porque el cercado siempre tendrá un agujero por donde salir. Desteñidos los clanes que ahora prometen después de tanto dolor...